Somos una empresa familiar y artesanal ubicada en Blancas, en la comarca del Jiloca (Teruel). Hace más de 20 años empezamos con 500 m² de tierra y un sueño claro: recuperar el cultivo tradicional del azafrán de Teruel, una flor que durante siglos formó parte del paisaje, la economía y la cultura de nuestra comarca.
Hoy cultivamos 5 hectáreas de forma ecológica, en un entorno de altiplano a 1.100 metros de altitud, con poco riego artificial y un clima extremo que da lugar a un azafrán con aroma profundo, color intenso y sabor incomparable.
El proceso es totalmente manual y artesanal: recolectamos las flores una a una al amanecer, desbriznamos en el mismo día y secamos con cuidado. Así conservamos todo el valor sensorial de cada hebra y cuidamos un saber transmitido entre generaciones.
Cultivar azafrán aquí es un acto de paciencia, respeto y conexión con la tierra.
Gracias por descubrirlo con nosotros.
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